Después del XXIV Congreso y de la Asamblea General Ordinaria que tuvo lugar en Luanda, del 23 al 25 de mayo, llegó el momento de avanzar en el cumplimiento de la misión de la Federación. Creemos en el compromiso de cada una para que nuestra Organización sea cada vez más fuerte, activa y presente en la vida de cada mujer, cada niña y cada niño que aún no puede disfrutar de sus derechos y libertades.

Queremos y debemos continuar la obra iniciada por nuestros antecesores y honrar las luchas y todo el esfuerzo realizado por los fundadores de esta gran Organización. 

Continuando con su labor y preparando a las nuevas generaciones de activistas para que nos sucedan, porque solo así valdrá la pena el esfuerzo de esas mujeres.

El Congreso de Luanda fue un éxito, gracias al compromiso de todos, con el coraje de mi antecesor, el Dr. Osvalda Joana, por llevar el evento a Luanda, el primer evento presencial después del inicio de la pandemia, y a los compañeros de la Associação Angolana das Mulheres de Carreira Jurídica que aceptaron el desafío de organizar el Congreso y crear las condiciones para nuestra Asamblea General Ordinaria, donde se eligieron los nuevos miembros de los órganos de la Federación.